Visita un fabricante de autocaravanas de expedición

Un soporte de acero colgando de cuatro cadenas de metal bajo una grúa se levanta sobre una caja de color gris piedra brillante. Se aplican correas y la caja queda suspendida en el aire. Un Arocs 1840 4x4 rueda hacia atrás muy despacio. La caja, una cabina habitable de 3,8 toneladas, se coloca entonces lentamente sobre el camión y se ancla a él con tornillos de 36 milímetros de longitud. En su proceso hasta convertirse en una autocaravana de expedición, el Arocs ha dado ahora un gran paso.

Vehículos para aventureros.

Este tipo de vehículos que se construyen aquí en la empresa Krug Expedition en la localidad austríaca de Schladming son cada vez más populares. Los aventureros quieren llegar con su hogar móvil a lugares apartados de las carreteras pavimentadas donde normalmente es imposible acceder con una autocaravana de camping convencional.

Werner Müller, que trabaja desde 2021 en el departamento de ventas en la central de la empresa en Schladming, al pie de las imponentes montañas Dachstein, dio él mismo la vuelta al mundo con una autocaravana de expedición. «Los vehículos deben ser capaces de superar condiciones extremas como por ejemplo temperaturas muy altas o muy bajas, grandes alturas o suelos blandos. Para los viajes a Siberia todo debe estar hecho a prueba de heladas, y tampoco el gasóleo puede congelarse. Por su parte, en el desierto la potencia frigorífica debe ser la adecuada para mantener el motor a temperatura de servicio. A alturas extremas, como en los pasos de montaña de la India, la calefacción debe funcionar bien a pesar del bajo nivel de oxígeno», explica Müller, de 32 años.

Müller trepa a la cabina del Arocs y conduce el 4×4 hasta la siguiente estación de pesaje. La báscula marca 12,6 toneladas. «A esto todavía hay que sumarle un poco cuando hayamos acabado con todos los trabajos de remodelación y montaje». Pero ahora hay prevista ya una primera marcha de prueba. Para ello, activa los bloqueos del diferencial con el botón giratorio a la derecha del volante, la pantalla secundaria le da la respuesta óptica y el Arocs se mueve con suavidad sobre el campo de gravilla.

Depósitos extragrandes, tracción permanente en todas las ruedas.

Entre las características del vehículo se cuentan dos depósitos extragrandes más un separador de agua con una capacidad total de 680 litros. «A veces ocurre que en países remotos solo se consigue gasóleo de mala calidad. Entonces sirve de ayuda el separador de agua incorporado», explica Müller.

Además, el Arocs dispone de tracción permanente en todas las ruedas con tres bloqueos y está equipado con un sistema de regulación de la presión de los neumáticos: cuanto menos aire, tanto mejor es la tracción sobre arena. Un sistema energético con paneles solares y grandes baterías de litio ofrece a los viajeros independencia respecto a las fuentes de electricidad externas. Además, en caso de emergencia, un generador se encarga de que se pueda generar electricidad también sin la energía solar. La calefacción está acoplada al vehículo base, de modo que el motor se puede precalentar con la calefacción del espacio habitable, pero también a la inversa. Müller añade: «Así se tiene calor directamente cuando después de un viaje se pasa al espacio habitable desde el puesto de conducción». Una instalación depuradora de agua con un eficaz sistema de filtración permite depurar el agua de los ríos y hacerla potable.

Tras el regreso al taller en el recinto de la empresa, Werner Müller trepa al espacio habitable por una escalera convencional, puesto que aún falta por montar la escalera con extensión eléctrica. «El interior de la caja se ha mantenido muy minimalista para que haya lo mínimo posible que estropear». En cualquier caso, no le falta ni un ápice de confort: bancos acolchados, línea con cocina eléctrica y fogón de inducción y un cuarto de baño por separado con ducha e inodoro sin productos químicos Las paredes de sándwich de 60 milímetros del espacio habitable aíslan tan bien como una pared de madera de 300 milímetros.

Los trabajos continúan en el taller. Entre otras cosas, aún se van a instalar grandes electrodomésticos en el espacio habitable y cajas de almacenamiento en el chasis. En cualquier caso, no falta mucho para que este camión recorra remotas regiones como Tanzania, los Emiratos Árabes Unidos, Alaska o Canadá, al igual que han hecho antes de él todos los demás vehículos de Krug.

Fotos y vídeo: Alexander Tempel