Transporte de hormigón: Las obras son el alma de la familia Moris

El director general Peter Moris fue el primero en llegar a la obra esta mañana. Tiene que rociar hormigón. Las luces LED brillantes de sus Arocs 2840 y el mástil de la bomba de hormigón iluminan toda la superficie. Ahora está esperando a Robin, uno de sus dos hijos, que llegará en breve con su Arocs con remolque hormigonera. Robin también ha madrugado esta mañana, pero antes tiene que recoger una carga de hormigón fresco en la planta de hormigón de Interbeton.

Mientras espera, Peter Moris explica la visión que ha perseguido desde la fundación de la empresa en 2008: «Siempre que sea posible, intentamos ofrecer un valor añadido a los clientes de nuestro contratante. Las luces LED adicionales en mi pulverizador de hormigón y sobre el parabrisas de mi Arocs son un buen ejemplo de ello. Cuántas veces no ocurre que los empleados de las obras tienen que conformarse con un equipo de iluminación escaso. Una gran cantidad de luz marca una gran diferencia en el trabajo y la seguridad».

Y así ha sido hasta hoy, aunque en 2008 montó su propia empresa. «En aquel momento, Inter-Beton se hizo cargo de mi empresa. Se centraron deliberadamente en el transporte de hormigón y concedieron la comercialización a subcontratistas. Al crear mi propia empresa en ese momento, me aseguré inmediatamente de tener una cartera de pedidos muy completa en las provincias de Amberes y Brabante Flamenco».

Peter Moris eligió un Actros en aquel momento. Seis años más tarde le siguió otro camión Mercedes‑Benz. «Los camiones se pueden utilizar en cualquier momento y en cualquier terreno y, más tarde, tienen un buen valor de reventa», dice Peter Moris mientras su hijo Robin llega a la obra.

Siguiendo los pasos del padre.

Al igual que su hermano mayor Nick, Robin siguió los pasos de su padre. Con poco menos de 19 años, ya era el conductor de hormigoneras más joven de Bélgica. «Ahora, a los 21, también cuesta encontrar un compañero de profesión más joven, ya que la falta de conductores también es muy perceptible en el sector del hormigón», dice Peter Moris. Robin también trabaja exclusivamente para Inter-Beton. Estudiante de electromecánica, se incorporó a la empresa hace unos tres años en lugar de continuar sus estudios: el gusanillo del hormigón lo había picado demasiado. Incluso antes de obtener el permiso de conducir C, ya había superado el examen para obtener el número V. Así, el futuro de la empresa estaba asegurado.

La denominación «empresa familiar» no es exagerada en el caso de Pjorre Beton, ya que, además de Peter, sus dos hijos y un empleado que utiliza la segunda bomba de hormigón, la mujer de Peter trabaja en la empresa desde hace algún tiempo, mientras que el hijo mayor, Jan, ayuda ocasionalmente como carpintero cuando hay que pulir el hormigón.

¿Y de dónde procede la preferencia por los camiones Mercedes‑Benz? No es solo la fiabilidad y la estabilidad de valor del Arocs lo que tanto valora el gerente. Los esfuerzos continuos de Mercedes‑Benz por reducir el consumo de combustible también han desempeñado un papel decisivo en su elección: «En comparación con mi primer Actros, mi actual Arocs es entre un 20 y un 30 por ciento más económico teniendo en cuenta tanto la conducción como el bombeo. Son cifras convincentes».

Fotos: Dirk Willemen