4-Xtremes - Parte 56: Listo para la isla... y el tráfico por la izquierda

Desde las restricciones relacionadas con la pandemia hasta los visados denegados, nos hemos encontrado con multitud de obstáculos durante nuestros viajes. Antes de continuar nuestro viaje desde el estado pirenaico de Andorra hasta Francia, una pegatina amarilla nos frena. A partir de 2021, todos los vehículos de más de 3,5 toneladas deberán llevarla. Esto está bien, porque tiene por objeto concienciar a los usuarios de la carretera de los peligros que entraña el ángulo muerto.

El problema es que no encontramos a nadie que nos venda la pegatina. No en Andorra, donde hicimos un sondeo en las gasolineras, no en el paso fronterizo y tampoco en Francia. Algo comprensible, Es domingo y muchas tiendas están cerradas. Atravesamos un pueblo tras otro, hasta que encontramos una tienda en la que nos entregan la auténtica sobre el mostrador.

Atravesamos Francia en marcha rápida, ¡pero Le Mans es parada obligatoria!

Francia tiene mucho que ofrecer. Sin embargo, esta vez solo queremos pasar unos días en la Grande Nation y dirigirnos directamente al norte. Completamos ambiciosas rutas diarias por carreteras secundarias y siempre nos dirigimos a un Aire Camping Car, un área de descanso para autocaravanas, por la noche.

De vez en cuando damos una vuelta en bicicleta para, al menos, percibir un poco del ambiente del pueblo francés. Pero hacemos una parada más: en Le Mans. Aunque con el Axor no podemos dar una vuelta en el histórico circuito. Aun así, merece la pena la visita: la sonrisa en la cara de Mike lo dice todo.

Welcome to Great Britain!

Unos 270 kilómetros más al norte –sólo cuatro días después de colocar la pegatina amarilla– subimos al ferry en Dieppe. Después de cuatro horas en el Canal de la Mancha, nos reciben: Welcome to Great Britain! Los funcionarios de aduanas echan un rápido vistazo a nuestra cabina, y ya estamos parados en el primer cruce de la pequeña ciudad de Newhaven. Por supuesto, por el lado izquierdo de la carretera.

Ahora tenemos que conducir con precaución, tomar las rotondas en el sentido de las agujas del reloj y cambiar de carril de forma meditada al girar. Además, como copiloto, yo, Andrea, tengo que vigilar activamente el tráfico. Por ejemplo, en cruces con poca visibilidad para Mike a la derecha o al adelantar. Pero al final, todo esto es sobre todo una cuestión de acostumbrarse.

A través de los siglos en Avebury Manor.

Nos quedamos en las carreteras rurales y visitamos primero Avebury, en el sur de Inglaterra. El círculo de piedras megalítico que hay allí no es tan conocido como el de Stonehenge, pero no es menos impresionante. Originalmente había aquí más de 150 piedras, hoy solo quedan 36. Las más pequeñas miden unos dos metros de altura, la más grande mide unos 5,5 metros y la más pesada pesa unas 40 toneladas. Es difícil imaginar cómo la gente de la prehistoria podía mover tales monstruos.

En Avebury también hay una mansión del siglo XVI (en inglés llamada de manor). En 2011, la BBC utilizó la propiedad como lugar de rodaje para un programa de televisión y la hizo reconstruir y decorar siguiendo el estilo de diferentes épocas. Si pasas de una habitación a otra, vagas desde el siglo XVI hasta el XX. Además, puedes tocarlo todo e incluso probarte la ropa.

Una montaña rusa de emociones en el Mar de Irlanda.

En Fairbourne, en el Mar de Irlanda, nos maravillamos con un ferrocarril de vapor. Nos dejamos llevar y visitamos todo tipo de pueblos costeros. Durante un paseo por la playa con un cortavientos y una cinta en la cabeza, tenemos que reírnos cuando nos encontramos con gente en bañador que incluso se atreve a meterse en el mar. Al parecer, el pleno verano aquí comienza con temperaturas mucho más bajas que en Europa Central.

Y entonces se nos quitan las ganas de reír: nuestra perra Aimée está muy contenta con la fresca costa y los verdes prados que hay detrás y quiere salir a pasear varias veces al día. Sin embargo, unos días después, todo cambia y tenemos que despedirnos de ella. Hemos pasado más de 14 años con ella y hemos vivido innumerables aventuras juntos. En todas las futuras aventuras, la llevaremos en el corazón. Completamente abrumados, nos dirigimos al siguiente mejor camping, donde nos tomaremos un descanso de unos días para recomponernos.

Fotos: 4-Xtremes