Ángel Nieto y su mercancía favorita: aceite de oliva

Reportaje

'Embajador' del oro líquido.

Ángel Nieto transporta aceite de oliva virgen por toda Europa, a bordo de su Actros 1848.

Cuando está de camino, Ángel come siempre una ensalada, aderezada, cómo no, con aceite de oliva virgen extra.


Cada mañana, antes de mojar su tostada con un chorro de aceite, Ángel dedica un instante a contemplar el color de este «oro líquido» y aspirar su aroma: «El aceite no solo se disfruta con el paladar, sino con todos los sentidos», afirma. Desde siempre, el conductor desayuna una rodaja de pan untada con aceite de oliva, indispensable en la cocina andaluza. A sus 45 años, cuenta con una experiencia de un cuarto de siglo en el ramo del transporte. Los últimos 18 años ha prestado sus servicios en el tráfico internacional de larga distancia. «Me encanta la sensación de libertad que tienes en carretera», dice. En la actualidad trabaja para Transruiz, con sede en Sevilla. Esta empresa está especializada en el transporte de productos alimenticios líquidos, ante todo, aceite de oliva. De esta forma, Ángel tiene la suerte de transportar su alimento favorito: «Me siento como un verdadero embajador del aceite de oliva», exclama.



«Una ensalada sin aceite de oliva es como un día sin sol.»

– Ángel Nieto


Placer para los cinco sentidos.

Ángel transporta aceite de oliva por toda Europa, principalmente con destino a Francia, Alemania e Italia. «Para mí, el aceite de oliva es mucho más que un aderezo», asegura. Con su Actros 1848 dotado de cabina GigaSpace, Ángel acude a distintas cooperativas agrícolas y fabricantes a cargar el aceite de oliva virgen extra. Para este fin dispone de una enorme cisterna monocámara de 25 toneladas, equipada con un compresor independiente y un mando para regular la temperatura. De vez en cuando, Ángel cubre trayectos dentro de España. Ayer, por ejemplo, cargó 25 toneladas de aceite de oliva virgen extra en Almería, y hoy los llevará a Sevilla, a la empresa embotelladora Goya. 

Antes de descargar, Ángel procede conforme al procedimiento prescrito: se sube a la cisterna y extrae un par de muestras de aceite, que entregará a continuación al jefe de bodega, Antonio Crespo, para que las examine. Este las enviará al laboratorio, donde se analizará su pureza y su calidad. Tras obtener el visto bueno, Ángel descarga las 25 toneladas de aceite, que quedarán almacenadas en Goya para su posterior embotellado.



Oro líquido.

Una de las principales rutas de Ángel parte de Dos Hermanas (Sevilla). Allí se encuentran las instalaciones de una cooperativa agrícola en la que recoge el aceite que transportará a Hamburgo o Dresde. Al mediodía, incluso cuando está de camino, Ángel come siempre una ensalada, aderezada, cómo no, con aceite de oliva virgen extra. «Su sabor me sugiere los paisajes más bonitos de Andalucía», dice. Siempre lleva una botella de «oro líquido» en su cabina. «Además es muy bueno para la salud, porque protege contra enfermedades del corazón», asegura.


Antes de emprender la marcha, Ángel se sube al semirremolque, extrae una muestra de aceite y se la entrega al jefe de bodega.


Hasta tres semanas en carretera.

Ángel es un buen ejemplo del estrecho vínculo entre la cultura andaluza, el aceite de oliva y la dieta mediterránea. «Una ensalada sin aceite de oliva es como un día sin sol», mantiene. España es el mayor productor de aceite de oliva del mundo. De los 1,7 millones de toneladas de aceite de oliva virgen extra que se producen anualmente, alrededor de 1,04 millones proceden de Andalucía. Ángel está soltero, y para él no es problema pasar dos o tres semanas en carretera. «Me he acostumbrado a este estilo de vida y lo disfruto mucho.» Medio en broma, Ángel asegura que se puede imaginar seguir viviendo sin pareja, pero no sin su Actros o, todavía menos, ¡sin su aceite de oliva!


Fotos y vídeo: Begoña Tremps

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